Por las calles de Trelew, no pasa desapercibido el grandote Lenier Peró, un pesado cubano que recaló en la Patagonia y que ya lleva 3 peleas profesionales realizadas en Alemania. No es el primero, sigue la huella inaugurada por William Scull en éstas lejanas tierras, frías pero cálidas en afecto y pasión boxística. “Después de los Juegos Olímpicos había decidido no pelear más, retirarme hasta que mi amigo (William) Scull me invitó a venir a ésta parte de Argentina”.
Peró tiene 27 años y en su país es considerado una esperanza entre los heavy y lo vinculan automáticamente con Luis “King Kong” Ortíz, quien lo apadrinó en sus comienzos por ser de su misma ciudad, Camaguey, la más grande y antigua de Cuba. Se calzó los guantes a los 8, siendo un niño y pasó fugazmente por la lucha pero su prolífica carrera amateur en el boxeo incluye el oro en los Juegos Olímpicos de la Juventud y dos campeonatos panamericanos en Guadalajara 2011 y Toronto 2015.
“Creo que me voy a hacer de Boca”, bromea Lenier quien se dice adaptado a los asados, los sorrentinos y los ravioles infaltables en la cocina argentina. El déficit de pesados en el país lo condiciona pero no le quita su intención de meterse en el mercado estadounidense, ahí donde se juegan las Ligas Mayores del peso completo. “Había firmado un contrato en Alemania pero aprendí un poco del negocio. Un manager de Estados Unidos pagó por disolverlo y ahora quiere que entrene en México para desembarcar en EEUU”.
Su metro noventa y su imponente contextura lo destacan en el gimnasio Dream Box donde trabajaba hasta donde la pandemia lo permitió. “Nosotros nos adaptamos rápido a las cosas. Me fuí acostumbrando de a poco, hablando con la gente que te ve de otro lugar y conversa sobre todo por ser deportista. Conociendo gente, uno se adapta a la sociedad rápidamente”.
“No hay muchos pesados en Argentina -lamentó-, quiero retar al mejor pero me dicen que no. Tengo licencia argentina y me gustaría pelear acá, hay admiradores y familia que me quiere ver. No importa la calidad del contrario”, cuenta el cubano quien en pareja con una trelewense, aguarda ser padre en pocos meses.
IT/Piñas del Sur