Adrián Maximiliano Robledo, está como todos en la lista de espera. De que se levanten todas las restricciones; se pueda retomar el gimnasio con normalidad para volver a calzarse los guantes. Ya cumplió con el debut, pasó una prueba nada fácil y ahora, se proyecta con el objetivo de combatir al menos una o dos veces en lo que resta del año. “Estoy entrenando todos los días a la tarde, espero acomodarme con el horario del trabajo para poder entrenar a la mañana”, cuenta “Maxi”, trelewense con 1-0, hijo de Américo, ex boxeador y reconocido entrenador del Valle. “Los planes eran hacer una pelea cada dos meses o lo más cercano posible pero la pandemia creo que complicó a todo el mundo deportivo por igual”.
Su “primera vez” como rentado tuvo además de los nervios, una medida exigente en el Club Huracán ante Emanuel Bastias. “La experiencia fue buena contra un rival duro y fuerte con más peleas que yo. Creo que la gente que me fue a ver esa noche vio una pelea pareja. No quisimos traer a alguien para ganar en el primer round como es normal acá en la zona cuando debutan. Quise demostrar que no importa a quién traigan”, reconoce Robledo quien asume estar preparado en todos los aspectos y en su máximo potencial. “Física, técnica y mentalmente estoy al 100 por ciento para cada desafío”. La noche del debut, incluyó algún “susto” por algún descuido defensivo pero a la vez, una recuperación acorde con caída del rival incluída y victoria por puntos.
Acostumbrado a los triunfos rápidos, a noquear temprano y a sacar diferencias, ésta vez el profesionalismo le planteó a Maximiliano Robledo, obstáculos que parece listo para sortear.
Al enumerar sus objetivos, el púgil del barrio Progreso de 20 años y gran proyección describe: “El boxeo ahora es mi trabajo. Yo lo tomo así. En el 2020 me gustaría hacer una o dos peleas. El año que viene veremos, hay que avanzar paso a paso hasta el título argentino y después veremos qué sigue”. “Maxi” se siente cómodo trabajando en el gimnasio Dream Box donde da clases y a la vez, entrena. “No me doy muchos gustos, solamente acomodé mi auto durante la cuarentena y en el tiempo libre me gusta distraerme con la guitarra”.
«No quisimos traer a alguien para ganar en el primer round como es normal acá en la zona cuando debutan…» (Robledo dixit)
Robledo integra la lista de las jóvenes figuras del boxeo chubutense. Y en una línea paralela con Matías Montesino y Ezequiel Matthysse, simboliza la generación que se viene aunque minimizó la expectativa que en el ambiente boxístico representó ésta nueva etapa de su carrera. Le escapa al rótulo de “promesa” y las miradas del resto. “Yo no lo tomo así. De amateur pensé hacer mi carrera para mí y creo que de profesional pienso de la misma manera. Los logros los quiero para mí y mi equipo”.
Agradeció el apoyo y el respaldo del gimnasio al que representa. “Siempre me dieron una mano los dueños del gym y hasta ahora me vienen ayudando ellos en todo así que me siento muy agradecido con ellos”.
IT/Piñas del Sur.