No fue un cumpleaños más para la boxeadora truncadense Ana Romina Guichapani. Rodeada del afecto de su gente, familiares y amigos recibió un regalo inesperado. Es que recibió un emotivo homenaje de su padre y entrenador Raúl quien resguardo la sorpresa hasta el límite: un mural que recrea la imágen de la primera profesional nacida en Pico Truncado, Santa Cruz. En su natalicio número 31 Romina fue sorprendida por una gran cantidad de vecinos, de varios barrios de su ciudad con regalos, muestra de cariños y emocionados por su trayectoria e inauguración oficial de el mural en calle Moyano y España. Merecido testimonio para la campeona, orgullosa de sus raíces sureñas y de llevar los colores de Truncado por el país y el mundo.