“La intención es prepararnos súper bien para volver de la mejor manera”. Los vientos de la Patagonia no le resultan extraños a Federico Rodríguez, el bonaerense que ya estuvo viviendo en Comodoro y debutó como profesional en Trelew. Justamente, en éste destino, eligió quedarse para reconvertir su carrera y retomar su camino boxístico.
“Creo que acá voy a estar más concentrado y estoy al cien por ciento metido en el entrenamiento, me puedo poner mejor que si estuviera en Buenos Aires. La idea es salir afuera y hacer carrera allá, poder llegar a pelear en las grandes ligas”. Y dice que la técnica “está presente” aunque la base física, el ritmo boxístico y la continuidad llegan solamente con las peleas.
“Actualmente estaba trabajando de comerciante en San Vicente. Y allá no estaba entrenando ya que no me daba el tiempo por el trabajo”. En diciembre del 2018 debutó como profesional y reconoce el vínculo con Martín Décima. “Quiero llegar a ser alguien y poder dejar mi marca en el futuro”, cuenta Federico quien junto a su amigo Roberto Moreno, profesional también conocido en la zona, trabaja a las ordenes de Mario Narvaes.
Recuerda especialmente su paso por el ex Club La Fábrica y lo que representó el maestro cubano Juan Fernández.”Reconozco que fue el mejor momento de mi carrera ya que estaba con el mejor entrenador que tuve. Era un fenómeno el Moro”.
“Ahora se pone difícil ya que no estaba entrenando y arranqué el 5 de noviembre cuando llegué. Me siento dolorido en el cuerpo pero creo que en poco tiempo vamos a ponernos bien. Confío en el entrenamiento de “Mauko” ya que es muy atento y va viendo mis errores. Para mí es como volver a empezar”. Esta vez la aventura en el sur, tiene otra motivación: su hija y su familia son un pilar importante para volver a creer en sí mismo. “Cuando Roberto (Moreno) me lo propuse, ni lo pensé y armé el bolso. Pude venir gracias a mis hermanos y mi mamá que me dan una mano con mi nena. Yo voy a hacer que todo valga la pena”, finalizó.