La confianza parece ser el motor de José Vargas, el boxeador cordillerano que asume una localía absoluta en tierras comodorenses. Acá vive y acá entrena, sumando apoyo a partir de la simpleza y del esfuerzo que refleja con su entrenamiento a diario. “Vengo bien, será mi primera pelea del año y en Comodoro Rivadavia después de un tiempo”, cuenta “Varguitas” quien rindió hoy 67,70 kilogramos en el pesaje oficial. Su rival, Emilio Aibar acusó 67 kgs. Ambos animarán la pelea estelar a seis rounds en el gimnasio Municipal Nro. Uno.
El COVID y los tiempos de pandemia no le dieron demasiadas oportunidades a «Varguitas» quien reconoce que sin haber estado en el cien por ciento físicamente, combatió sin resultados positivos. Perdió por puntos ante Rodrigo Coria en San Pedro, Buenos Aires, luego de un intento (con viaje incluído) fallido por restricciones sanitarias. Y en la última, cayó por nocaut técnico ante Leandro Fonseca en Cutral-Có, Neuquén.
En tiempo de recuperación, proyecta un 2022 positivo. Peleará por primera vez bajo la promoción de Piñas del Sur y Lago Box y además, ajustó detalles boxísticos entrenando durante una semana en la ciudad de Trelew donde guanteó con Marcelino “Nino” López. “Estamos entrenando duro, veremos cómo nos va. Hay que remontar la racha del año pasado, donde tuvimos dos derrotas. La solución es solamente entrenar, seguir mejorando día a día”, dijo Vargas (7-2, con 2 como profesional) quien chocará con el catamarqueño radicado en Catriló Emilio Aibar, pupilo de Roberto Arrieta, un viejo conocido de los chubutenses. Con 4-15 como profesional enfrentó en distintas épocas a Walter Castillo, Mauro Corbalán, César Antín y Carlos “Zurdo” Vásquez.