Nunca es fácil laburar de boxeador. No hay horarios, no abundan los premios y a veces, mandan las pálidas. Sufrir con la balanza y con los golpes marcados en la piel, hace que los aplausos se valoren. En esa línea, Federico Vega reconoce que aunque nada parezca fácil, siempre hay crédito para soñar aunque en el medio haya que transpirar.
“Yo trabajo en una pesquera desde hace cinco años, de lunes a lunes y solo paramos unos meses en los cambios de temporada. Además entreno; comparto tiempo con mis hijas y hasta doy clases de boxeo a los chicos de mi barrio. Duermo tres horas y nunca paro” describe Vega.
El madrinense radicado en Trelew se prepara para pelear éste fin de semana en Picún Leufú ante Guillermo Gutiérrez, con el desafío de obtener su primer triunfo como profesional. “Entreno doble turno, ya apretando los últimos kilos con guanteos muy duros. Ya con ganas de dar guerra como siempre. El rival es zurdo, invicto y fuerte pero me siento confiado”.
“Entreno fuerte, mejorando y creciendo. Ninguna de mis peleas fueron livianas y nunca tuve rivales fáciles. Vengo peleando con buenos boxeadores, dando guerra y sumando experiencia. Se me va a dar por todo el esfuerzo”, reconoció el púgil quien lleva 0-4 siempre como visitante. “Me jode no pelear en mi ciudad, con mi gente. Igualmente entreno para pelear con quién sea y dónde sea”.
Federico Daniel Vega debuto como profesional en junio del 2022 ante Ariel López, quien lo venció dos veces antes del límite. Después registra derrotas ante Gustavo Lemos en Comodoro Rivadavia y ante el chileno Matías Vargas en la ciudad de Valdivia. Nunca pudo hasta hora, pelear como local.
Adelantándose a su próxima salida, Vega destaca que “Me dijeron que Gutiérrez viene de noquear al hijo de la Tigresa y que lo sacó del ring. A mí no me afecta y no me asusta porque vengo de pelear con Ariel López que tiene experiencia. Peleé muy arriba en peso, en 75 kilos y pude aguantar sus manos”.
Siendo amateur, Vega era “Toro” en el ring aunque prefiere el apelativo de “Pepo”, quizás menos conocido en el ambiente de las piñas. Pupilo del cubano Ivan Díaz Pequeño, no esconde la expectativa de festejar por primera vez. “Le agradezco a Gonzalo Cano de Concesionaria La Unión, que es mi único sponsor. A mis hijas, mi mamá que siempre me ayuda con las dietas o cuando falta un manguito; mi novia Abril que me ayuda a entrenar y a comer sano”.
