Maximiliano Noria se siente profesional antes de subirse al ring el próximo viernes. Inclusive desde antes de tener en mano, la licencia que acredita su nuevo tiempo boxístico. El salteño que se siente caletense ya viene procesando el salto desde hace algún tiempo y se asume “a punto” para ponerle el sello a éste trámite.
“Estoy muy bien preparado pero reconozco que haya alcanzado el punto máximo ya que esto recién empieza y creo que puedo dar mucho más de lo que estoy haciendo”, explica el “Cubano” quien aguarda enfrentarse con el pampeano Jonathan Pinto Montiel en el Complejo Deportivo “Ingeniero Knudsen”.
“Todavía no quiero imaginarme nada, prefiero que llegue ese momento y me sorprenda para disfrutar un momento que será único para mí”. Noria reconoce estar acostumbrado al esfuerzo. “Salgo a correr a las 7, trabajo de 9 a 16; de ahí voy a hacer la parte de boxeo con mis dos técnicos, Daniel Chazarreta e Iván Vallejos. Tres veces a la semana hago la parte física en el gym con Daniel Antúnez”.
No le pesa la historia boxística que tiene Caleta Olivia, una plaza retraída que gozó de épocas gloriosas desde Pedro César Duarte pasando por Carlos “Tano” Velázquez, Daniel Arce hasta el único campeón del mundo nacido en la ciudad del Gorosito, Jorge “Locomotora” Castro. ”Es una alegría sumarme a la lista de profesionales que tiene la ciudad. Me siento muy contento que la gente me conozca; quisiera dejar bien representada a la ciudad. Espero ser un orgullo para todos mis familiares y amigos y en especial para mis hijos, mi señora y mi mamá”.
Caleta Olivia es una plaza retraída que gozó de épocas gloriosas desde Pedro César Duarte pasando por Carlos “Tano” Velázquez, Daniel Arce hasta el único campeón del mundo nacido en la ciudad del Gorosito, Jorge “Locomotora” Castro.
Noria propone sumar peleas y la suficiente experiencia como para subir los escalones prudentemente. “Si Dios quiere y todo va bien, por supuesto poder disputar un título. También el boxeo profesional es una oportunidad para contar con un puesto laboral para tener a mis hijos seguros con su plato de comida”.
“Quiero ponerme a prueba; sé que tengo cosas para cambiar y sumar muchas otras pero tengo toda la voluntad” cuenta Maximiliano quien asume contar con la confianza plena de su público en el gran estreno. A la hora de los agradecimientos, el flamante boxeador profesional enumera: “Primero a Daniel Chazarreta, que es mi gran entrenador y hace un gran sacrificio; Iván Vallejos que siempre está dispuesto a ayudarnos, a llevarnos y hasta para ayudarnos económicamente. También “Dany” Antúnez me prepara y me alienta. A Julio del Team 2.0; Heraldo Nanni; Manuel Vázquez que es un papá de la comisión y mi amigo Fabricio que antes de cada pelea me regala un pack de agua con sales minerales”. Sin decirlo, Noria asuma que ahí está la verdadera razón del esfuerzo…