Felipe Gutierrez llegó a su pelea número 13. Ninguna mala suerte. El día indicado, en el Polideportivo “Héroes de Malvinas”, cerca del mar y de su gente, se consagró campeón nacional juvenil de boxeo, un deporte que parece entender y ejecutar a la perfección. Tiene solamente diecisiete años y una experiencia quizás acorde a su edad: fue tres veces campeón provincial, otras tres campeón regional y campeón nacional en los Juegos Evita 2022 de Mar del Plata. En el último Nacional Juvenil había obtenido el bronce y ahora, se sacó la espina como local. “Elegí el boxeo porque me gustaba aunque igual mi papá de chico me llevaba a los gimnasios. A los doce años me puse a competir”.
Sus inicios fueron con Mauko, Mario Narváes hasta que decidió entrenar a las órdenes de “El Huracán”, el ex doble campeón de mundo y ahora docente formador. “Para mí es un orgullo y una muy buena experiencia trabajar con Omar habiendo sido él, un campeón del mundo tan reconocido”.
Nunca dudó desde el día uno, que el campeonato nacional sería para Chubut y por eso, sorteó con variantes, sus dos peleas ante el bonaerense Aquiles Maciel y el mendocino Dimas Andrade. “Estaba seguro que el oro se quedaba acá”, propone.
“Vivo en el barrio Etchepare y voy a la Escuela 787. Tengo a mi mamá Norma Rivero apoyando y a todos mis hermanos y mucho aguante de toda la gente” resaltó Felipe Gutiérrez quien ahora anhela poder viajar con la Selección. “Quiero representar a mi bandera”, sueña desde la euforia pero sabiendo que puede. Y seguramente, lo conseguirá. Fotos Norman Evans/Jornada Medios.