La referencia chubutense de Sergio Víctor Palma resultó acaso, una de sus derrotas más duras. Fue en el Luna Park, un ring a su medida en donde parecía tener una localía única. Tuvo esa vez en Juan Domingo Malvares a un inesperado “verdugo” patagónico porque “Mingo” quien evaluaba por entonces retirarse de la actividad; noqueó al chaqueño al minuto y ocho segundos del sexto round tras someterlo a un duro castigo. Palma ya estuvo sentido en el primer asalto y cayó otra vez en el tercero, sorprendido en pleno ataque, una especie de preludio de la definición.
Hasta ahí, nunca había sido noqueado por rival alguno y experimentó la sensación de verse desbordado, por un rival fuerte pero imprevisto. Fue el 4 de junio de 1983 ante ocho mil personas conmovidas por un resultado impactante, tan paralizador como la dinamita de un “Mingo”, dueño de todo. Apenas había pasado un minuto de la campana “llamadora” del sexto cuando Malváres conectó un zurdazo perfecto, letal, de viaje corto al mentón del ex campeón mundial.
Cabe un detalle referencial, las fotos que ilustran ésta nota son parte del archivo personal del reportero gráfico Daniel Feldman, quien entonces con 22 años cubrió las alternativas de aquel match para Diario Jornada, diario en el cual continúa prestando servicios tras desempeñarse en los diarios El Chubut y en los prestigiosos nacionales Clarín y Diario Deportivo Olé. Una “joya” que nos damos el lujo de compartir en éste segmento, un homenaje a la memoria del gran Sergio Víctor.
Palma en la Patagonia. El chaqueño rey de los supergallos hizo una sola pelea en Chubut y dos en la vecina provincia de Santa Cruz. Llegó al sur en 1978, año del Mundial y el 11 de octubre batió por puntos a Carlos Betbeder en el gimnasio Municipal de Comodoro Rivadavia y un año después, el 4 de mayo se presentó en Caleta Olivia ganándole en las tarjetas a Gilberto López, un rival repetido al que enfrentó en múltiples oportunidades. En la plenitud de su carrera, Sergio Víctor Palma llegó por última vez a la zona para defender el título sudamericano ante el moreno brasileño Danilo Batista, obteniendo una cómoda victoria antes del límite en el Complejo Deportivo “Ingeniero Knudsen” de Caleta Olivia. Ocurrió el 5 de julio de 1981. Su guitarra y su imágen agradable, siempre predispuesta al saludo y a la charla son parte del recuerdo de quienes lo conocieron durante su estadía en el sur. En el ring, con la mirada siempre atenta de Santos Zacarías, solamente había que aplaudirlo…
IT/Fotos gentileza Archivo Daniel Feldman.