La noche amateur puso en escena a los mejores valores de la región. Y en el ring del gimnasio Municipal Nro. Uno se completaron diez peleas entre aficionados y una exhibición con la organización de Piñas del Sur. Entre los puntos altos, se destacó el nuevo triunfo de Eric Encina (Barrio Ñaco) quien venció en fallo unánime al “Vikingo” Manuel Quevedo. En un fallo muy cerrado, no pudieron sacarse diferencias en los tres rounds. De hecho, una tarjeta empatada y dos que favorecieron al ganador, cerraron un resultado para hilar fino. Es que Quevedo mostró pasajes de solidez a partir de los golpes internos; tuvo puntería para conectar los mejores impactos y llevó el paso de una pelea que tuvo a Encina siempre en actitud ofensiva. Ahí estuvo quizás, la virtud que mejor explotó el pupilo de Matías Torá.
El esquelense Mauro Ulloa exigió al ascendente Lautaro Ramallo pero no pudo impedir que la potencia del local terminara inclinando la balanza. En distancia y sacándose los nervios iniciales, el “Cata” propuso ataque y pocos lujos provocando que su rival decida no salir a combatir en el tercer y último round.
Tampoco brilló Angel Correa, el dominicano quien terminó superando en fallo unánime a Valentín Vilte, de Río Gallegos. Siendo dominador, el pupilo del Team Alvarado, no pudo desplegar su mejor versión. Intermitente y con lagunas, sabedor de su dominio no propuso más allá de esa diferencia.
En uno de los mejores duelos de la noche, Luciano Silva de Río Mayo venció en fallo no unánime al debutante Cristian Vargas en una batalla llena de intercambios en la que el zurdo visitante potenció la guapeza de un local que nunca dejó de proponer. Daniel Alvar venció en fallo unánime al santacruceño Mateo Díaz y Jesús Alvarez derrotó por abandono en el tercer asalto al esquelense Román Nahuelquir quien sufrió tres caídas. Sin brillar, “Canelo” impuso la presión ante un rival que con aire, lo complicó. Erica Vera superó por puntos –unánime- a Pamela Arancibia y en la apertura Kimey Nora Pérez, de Puerto San Julián, superó a Macarena Morales.
El fondo no estuvo a la altura. Agustín Garay venció por descalificación en el tercero a Carlos Aylan en un combate desigual y en el que pudieron rescatarse pocos elementos positivos. Superado por el rival, Aylan apeló a infracciones y a una sucesión de amarres ante Garay quien proyecta en lo inmediato, su debut como profesional. Entre insultos y con una evidente nula voluntad de combatir, el árbitro Ernesto Vega descontó un punto en primera instancia para decidir minutos después, la descalificación.