Christian Luis reconoce el afecto cercano y el motor anímico que representa volver a combatir en su ciudad después de una derrota que no estaba en los planes. El “Potro” peleará este sábado en General Roca ante Enzo Orellana en una vuelta recargada. “Replanteé mi trabajo y tanto en lo físico, lo mental y lo técnico estoy mejor. Siempre quiero progresar y buscar lo mejor. Después de la pelea con Ramírez descansé un par de días porque fue dura; hicimos borrón y cuenta nueva para replantearnos los puntos débiles”.
Luis remarca su aspiración de meterse entre los mejores de su categoría; llegar al ránking argentino e inclusive poder combatir fuera del país. “Ahora necesito sumar una victoria después de lo que fue un resultado negativo. Creo que vengo haciendo las cosas bien, escalón por escalón y con metas muy definidas”, reconoció el púgil rionegrino del Haras Boxing Club. “Siento que la gente de Roca me tiene cariño y apoya al boxeo. Ojalá que nuestra ciudad pueda tener un campeón, ya sea yo o los chicos que vienen”.
El revés en Cutral-Có ante Kevin Ramírez representó una “enseñanza” a capitalizar en el debe. “Sé que estuve a la altura de la pelea aunque con el sabor amargo por la derrota. Dejó muchas cosas para corregir y puntos a favor”. El “Potro” asume que el entrenamiento y su autocuidado con factores determinantes. “Soy muy disciplinado y tomo al boxeo como mi segundo trabajo. Entreno muy temprano a la mañana, se siente el frío pero corremos si hay que hacerlo bien temprano donde hacemos también la parte física; me baño y me voy a mi trabajo (presta servicios en el ANSES). Después a la tarde-noche hago el otro turno con mi técnico y con Del Grecco”. Agregó que la motivación lo llegó a realizar un campus de entrenamiento en Buenos Aires para compensar la falta de spárrings en el gimnasio de Paniagua con la idea de pulir los últimos detalles.