A Maycol Roa le llegó la hora del debut. El rionegrino criado en Caleta Olivia y ahora establecido en Puerto San Julián cumplirá el primer paso de su sueño deportivo. “Desde que tengo catorce años y empecé a boxear; debutar fue mi meta. Es el gran momento que estaba esperando”, reconoce “Patín”, apodo que lo acompaña desde el jardín de infantes y la escuela. “Es que no tenía buen comportamiento y decían que me patinaba el coco”, bromea y explica.
A poco de subirse al ring por primera vez con guantes chicos, Roa reconoce que el esfuerzo físico valdrá la pena. “Llego un poco cansado porque mi peso de pelea son 52 kilos aunque ahora tengo la ventaja de que tengo un día de recuperación. En la parte mental tengo confianza ganas y ansias de que va salir todo bien”.
Sobre los cambios evidenciados en su plan de entrenamiento reconoce que todo comenzó con la alimentación y una dieta adaptada a la exigencia. “Hago tres turnos diarios. Corro por las mañanas y después hago lo físico y lo boxístico. Metí muchos guanteos con profesionales de Trelew, San Julián como también de Río Gallegos, Caleta y Tierra del Fuego. Les agradezco a todos los que me ayudaron”.
Para Roa el debut profesional debía darse como una circunstancia natural. “La verdad que ya tenía mucha ganas de dejar el cabezal ya no quería ser amateur porque también sentí que había perdido la motivación. Ahora empieza lo bueno, los golpes son más fuertes pero no tengo miedo. Mi objetivo es hacer una buena carrera vivir del boxeo y especialmente, disfrutarlo por sobre todas las cosas porque me encanta subirme al ring”.
“Patín” Roa encontró “su” lugar en San Julián donde tiene el apoyo y los medios para desarrollar una carrera sostenida. “José y Jano Tenorio me dieron una gran mano y me cambiaron la vida, le hablaron y me aconsejaron siempre. También tengo a agradecerle a Javier Castro de AOMA quien me brinda una gran ayuda y sobre todo a mi compañera Lea que está en todas apoyándome con mis hijos”.