Juan Huenchullán, otra licencia que estrena el INTA

Juan José Huenchullán prepara su viaje a Puerto San Julián y su desembarco en el boxeo profesional. El peleador del Gigante del INTA; pupilo de Diego Sañanco nació el 7 de diciembre de 1.994 (28) y afrontará “la” pelea que marcará su nueva etapa, el próximo sábado 11 en el salón “Nicanor Hernández” frente al rionegrino radicado en Santa Cruz, Maycol Roa.
“Hace mucho tiempo que hago boxeo. Siempre quise ser profesional pero por cosas de la vida ya sea por el laburo u otras circunstancias, uno se termina “colgando”. Ahora me siento más maduro mentalmente para tomar está decisión”, resume Huenchullán. “No sé si estoy en mi mejor momento pero me entreno bien y me gusta ir al gimnasio porque siento que esto es parte de mi vida” propone mientras “afina” la preparación y ajusta su cuerpo para afrontar el primer pesaje profesional.
Huenchullán tiene un largo recorrido amateur, combate desde los dieciséis años enfrentando a rivales de categorías diversas por su “sube y baja” en la balanza y porque cosas de la amplitud física. “Me gusta subirme al ring.  No quiero sonar soberbio pero considero que me la banco”, desafía por sus más de 40 combates realizados. “Igual nunca tuve una categoría exacta. Pelee con Alejandro Romero; Jorge Ñanco y Cristian Zúñiga entre otros”.
Listo y preparado para la acción, Huenchullán se las verá ante “Patín” Roa quien ya lleva una pelea con un empate incluído y asumirá el reto de ser visitante. Con todo lo que ello implica. “Estoy tranquilo e intento controlar mis ansias. Capaz en el día de la pelea aparezcan un poco los nervios pero ahora estoy entrenando y cortando peso. Me gusta entrenar, me siento muy bien guanteando con mis compañeros de gimnasio y con mi amigo Dylan (Navarro) quien también se prepara para debutar como profesional el año que viene”.
Juan trabaja como cuidador domiciliario, es soltero y no tiene hijos, tiene la motivación como bandera con la intención de boxear y darse a conocer en un ring. Sin apoyos externos pero con el acompañamiento de la familia que componen su madre y sus hermanos. “El boxeo para mí es una pasión. Tengo muy en claro que el profesionalismo es un desafío, otra cosa e implica otro nivel de trabajo y responsabilidad”, resumió.