La pasión parece ser lo último que se pierde. Jonathan Claudio Sauco nunca archivó la ropa de boxeador y continuó entrenando en la medida que las obligaciones laborales y los tiempos familiares se lo permitían. Siempre tuvo en mente, la idea de volver a sentir la adrenalina, el rigor y la vaselina en la piel. El próximo viernes 24, cuatro años después de su único combate como profesional, volverá a escuchar una campana como protagonista. “Volver significa muchísimo ya que aunque no estemos activos en el ring siempre estamos en movimiento”, dijo “Jony” que a los 33 años, cumplidos el mes pasado, no deja de perder la fe. “La motivación siempre tiene que estar pero es cierto que le agarré el gusto a estar con mi familia también”.
Sauco, nacido en Ushuaia, Tierra del Fuego, hecho boxísticamente en Trelew pero radicado en Comodoro Rivadavia desde el 2017 trabajó en silencio y la constancia le dará el premio de volver a pelear. Lo hará a cuatro rounds en peso pesado y ante el santiagueño Ramón Ibarra. “Estoy entrenando en el puerto en la escuela SUPA del profe Montiel. Por la distancia y la ayuda nos fuímos a entrenar con mi amigo Darío Alcapán y Lucho Montiel y también guanteamos en el Club de Boxeo Comodoro”.
“De mañana salgo a trotar y trabajo de 9 a 17,30 y luego entreno en el puerto de 18 a 20. La verdad me siento bien. En realidad yo peleo en crucero o medio pesado aunque siempre de amateur ya peleé en todas las categorías altas y todo está en la cabeza. La falta –dijo Sauco- de subir a un ring no tiene que afectar cuando los sparrings son un estilo de vida casi todos los días así que estoy tranquilo”.
Jonathan Sauco tiene una sola pelea cumplida como profesional. Debutó el 10 de mayo de 1919 cuando superó por nocaut técnico en el tercer round a Diego Fernández en el gimnasio Municipal Nro. Uno. Tiene 33 años y aunque combatirá en peso pesado, proyecta regresar a crucero, su peso original. Enfrentará el viernes 24 al santiagueño Ramón Ibarra.
Un nuevo espacio para el boxeo, la irrupción del Centro Asturiano le dará un vuelo y una jerarquía distinta a ésta velada que incluirá en su pelea estelar, al invicto local Ariel Leonel López ante el caletense Denis Andrade. “La verdad no conozco el gimnasio pero debe ser lindo formar parte de un evento en otro punto de la ciudad donde la gente tenga la oportunidad de disfrutar de éste deporte”.
“Para el futuro vamos a volver a mi categoría y quiero pelear un par de años más y no dejar pasar mucho tiempo entre peleas. A lo mejor quién dice tenemos una gran posibilidad en las categorías altas”, reconoció el boxeador residente en barrio Próspero Palazzo.
“Quiero agradecer a Othar Macharashvili por ayudarnos con el evento; al promotor Martín Décima por hacerme parte siempre en sus eventos; a Julio Casas por el apoyo que nos está dando, al Sindicato de Seguridad UPSAP, al Club de Boxeo Comodoro y la escuela SUPA”.