Glenda Violeta Higuera ya se metió en la historia como la primera boxeadora oriunda de Paso del Sapo, la puerta de entrada a la Meseta profunda chubutense. Como amateur, ya peleó varias veces en Buenos Aires e inclusive, una de sus peleas se emitió a través del ciclo “Boxeo de Primera” de TyC Sports. Orienta sus pasos al profesionalismo mientras acumula cinturones en Buenos Aires y como todos, aguarda la normalización de la actividad para volver a combatir.
“Descubrí el boxeo cuando fui al gimnasio con la idea de bajar de peso. El entrenador me decía que tenía condiciones y me preguntó si me animaba a boxear. Como yo me sentía cada vez mejor boxísticamente, lo hice y debuté”. Glenda reconoció que el deporte la absorbió por completo, comenzó a viajar y a recorrer, sumando rounds y conocimientos: Viedma, todo Chubut; Las Flores, Buenos Aires y Capital Federal. “El profesionalismo es el objetivo. Tenemos que enfrentar a las mejores y ya lo estamos haciendo. Ya guantee con la “Tigresa” Acuña; Brenda Carabajal, Brenda Pérez y Leila Castillo; tuve la oportunidad de conocer a muchos boxeadores profesionales y hasta fui parte de un festival televisado con Agustín Gauto de fondista. Me la dieron empate pero creo que la gané”, explica.
“Tengo 21 peleas. Las más destacadas fueron primero la que gané mi primer cinturón AMBAPA y la que hice para la televisión. También gané el cinturón de la Liga de las Estrellas y la Liga del Oeste, todo en Buenos Aires. Soy una boxeadora aguerrida; con corazón y mucho hambre de triunfar”, cuenta Higuera quien es mamá de Luis Emanuel, de dos años y compañero en cada uno de sus viajes deportivos.
Los gustos boxísticos que la definen pasan por la propia “Tigresa” y la santafecina Evelyn Bermúdez. Pacquiao y Mike Tyson son sus favoritos en la rama masculina. Le dicen “La Maquinita” y hoy representa a Esquel, la ciudad en la que vive. “Solo espero un poquito de apoyo en la ciudad a la cuál representamos; porque trabajamos para dejar el boxeo chubutense bien alto. Creo que nos merecemos más respeto ya que la última vez que volvimos de Buenos Aires mi entrenador se enteró que no era más entrenador municipal y nos quedamos sin gimnasio”, Luis Cárcamo quien además es su pareja, debió recurrir a armar a un galpón de su casa para salvar la falta de espacio y mantener la actividad de Glenda y el resto de sus pupilos. “También peleé en un Provincial de Mayores en Trelew donde hice la final con Haydeé Rodríguez, la More. Ella con 80 peleas y yo con solamente 7 peleas; hicimos 4 rounds y perdí por puntos”, recordó.
IT/Piñas del Sur.